COLOMBIA LE DA UNA LECCIÓN AL MUNDO, GRACIAS A MARÍA LARA
María Lara es una actriz con una pasión por su país y el objetivo humanitario para elevarlo. Nació en Cartagena, creció orgullosa de ser colombiana. Pero ya a los cinco años era consciente de la guerra civil, las pandillas, las drogas y la violencia en su país. “Recuerdo llorar debido a ello y en ese momento dije: ‘Colombia le dará una lección a todo el mundo’”.
Lara estudió ingeniería industrial en la universidad y al obtener su título ella ganó un concurso nacional de belleza y posteriormente comenzó su primera serie de TV. Se trasladó a Bogotá y su carrera despegó. A pesar de su éxito, sin embargo, Lara sentía que había perdido de vista su propósito. Después de ser introducida a El Camino a la Felicidad (TWTH) por la actriz venezolana, Ruddy Rodríguez, ella estaba revitalizada. Se convirtió en la Embajadora de El Camino a la Felicidad de Colombia y creó su propia portada del librito. “La corrupción, las drogas, las pandillas, ocurren debido a la falta de valores morales. Eso es lo que maneja El Camino a la Felicidad”, dice Lara. Ella se llevó el librito a entrevistas con los medios y pronto los anuncios de servicio público de El Camino a la Felicidad fueron emitidos en la TV. Uno de sus primeros seminarios era para los ex miembros de la notoria banda de Latin Kings. Luego, para llegar a los jóvenes antes de las pandillas, empezó a hacer seminarios para los niños. Un seminario llevó al siguiente, hasta que estaba dando 3 o 4 en un día, llegando a un total de 14 854 niños con El Camino a la Felicidad. Además, no solo les entregó a empleados en 121 empresas, sino también a la policía, que llevó El Camino a la Felicidad a las calles, creando una mejor relación con el público. Con el tráfico de drogas, la criminalidad y “casas para cortar” (donde las víctimas de las guerras de cárteles eran asesinadas) que fueron descubiertas al oeste de Bogotá, en Buenaventura, Lara fue ahí. Ella entregó El Camino a la Felicidad a 300 militares de la armada, el ejército y la policía, quienes distribuyeron 200 000 libritos en la ciudad. En 8 meses, los medios reportaron que el crimen en el área había caído un 70 % y Lara fue invitada a entregar a los oficiales militares. Cuando el Ministerio de Defensa fue premiado por Transparencia Internacional, Filial de Colombia, como el mejor ministerio y el segundo más ético de 287 instituciones en el país, ellos reconocieron a El Camino a la Felicidad y a María Lara por ayudarles a “garantizar la transparencia de comportamiento, que se basa en los valores fundamentales, principios y normas”. Con el índice de homicidio en Colombia siendo el más bajo en 42 años, Lara dice: “Recuperamos a nuestro país. Estoy muy orgullosa”. Ve la historia completa en es.scientology.tv/MLara.
TOMANDO ACCIÓN
Proporcionando una Brújula Moral en la Escuela
Nuestras escuelas son el entorno perfecto para la enseñanza de los valores morales no religiosos presentados en El Camino a la Felicidad. Ahora es el momento perfecto para los educadores para solicitar materiales educativos de El Camino a la Felicidad y ponerlos en uso en sus aulas.
Estos materiales son una forma simple y eficaz de inculcar valores en los jóvenes con un código moderno imparcial que responde a las necesidades del siglo XXI. En el núcleo de todos los materiales está El Camino a la Felicidad: Una Guía Basada en el Sentido Común para Vivir Mejor con sus 21 preceptos.
El Kit de Recursos del Educador de El Camino a la Felicidad es el kit ideal para los maestros. Comprende un plan de estudios completo, el libro de El Camino a la Felicidad en película, anuncios de servicio público de carteles de cada precepto del libro de El Camino a la Felicidad y 24 ejemplares de El Camino a la Felicidad.
Los materiales son gratuitos para los educadores en elcaminoalafelicidad.mx/educator.
RESTAURAR EL RESPETO MUTUO
La Fundación de El Camino a la Felicidad Internacional trabaja para revertir la decadencia moral de la sociedad restableciendo la confianza y la honestidad, por medio de una amplia distribución de los 21 preceptos. Las donaciones apoyan la producción y distribución del librito de El Camino a la Felicidad y del material del plan de estudios.