LA “ANTORCHA PARA LA FELICIDAD” DE PAKISTÁN
Aisha Zafar de Pakistán se topó con El Camino a la Felicidad en su propia búsqueda de la felicidad…, literalmente, ella había escrito “felicidad” en los buscadores en línea. Lo que encontró fueron los 21 preceptos.
“Con El Camino a la Felicidad encontré algo que me ayudó con las preguntas y problemas que tenía en la vida”, dice Zafar. “Y sabía que al ayudar a otros me ayudaría a mí misma a sobrevivir mejor también”.
Decidió dedicarse a diseminar El Camino a la Felicidad a otros. Pero no estaba segura de cómo empezar, así que volvió a recurrir al internet. En la página de Facebook de la Fundación de El Camino a la Felicidad Internacional, encontró a un miembro del staff pakistaní que la puso en contacto con las personas activas en TWTH en Pakistán.
Eso fue hace solo cuatro años. Hoy en día, ella es la representante de El Camino a la Felicidad en Islamabad y ya ha entregado personalmente seminarios a unos 6000 estudiantes en más de 30 escuelas, además de talleres a grupos de jóvenes, empresas y funcionarios.
Sin embargo, aun cuando su historia es acerca de la felicidad, no todo ha sido fácil para ella.
“Me he enfrentado a una gran cantidad de problemas mientras hacía este trabajo”, dice. “En Pakistán, es muy difícil viajar sola como una mujer soltera. Pero al mismo tiempo, no es posible ir sola por ahí con cualquier hombre. Por eso la mayoría del tiempo he viajado sola”.
De hecho, algunos incluso trataron de desanimarla basados en su incredulidad de que alguien pudiera estar tan dedicado a ayudar a otros sin pedir dinero a cambio.
“Estoy haciendo esto como una pasión”, dice Zafar. “Algunos piensan que hay una intención oculta tras esto o algo así. Lo que les digo es que esto es algo que disfruto y que por eso lo hago como voluntaria. Así que aplico el Precepto 21 de ‘Florecer y Prosperar’ y sigo adelante”.
Incluso se encuentra con maestros que suponen que tendrán que pagar por sus seminarios y libros. Pero, por supuesto, ella les sorprende con libritos gratuitos de El Camino a la Felicidad para el aula entera y les entrega su seminario característico.
“En lo que a mí respecta, esta es una forma extraordinaria de formar el carácter de un niño al nivel básico de la escuela”, dice ella. “Escogí ayudar estudiantes para que tuvieran a alguien que les señalara el camino hacia a una vida mejor, y porque son el futuro”.
A pesar de todo lo que ha hecho por sí misma, nunca vacila en colaborar con grupos afines tales como Pakistán Positivo, Asociación para la Calidad Académica, Liderazgo en Pakistán y Sí a la Juventud.
“En lo que a mí respecta, esta es una forma extraordinaria de formar el carácter de un niño al nivel básico de la escuela”.
Y su pasión no pasa desapercibida. En su promoción para la Cumbre para Facultar a la Juventud 2016, el grupo Sí a la Juventud escribió esto, al presentar a Aisha y sus acciones humanitarias: “Aisha Zafar es una activista social por naturaleza, siendo una antorcha para la felicidad. Como oradora, ella ha abordado cada ciudad de Pakistán. Su encanto y pasión se combinan para motivar a jóvenes y niños desfavorecidos e individuos de todas las profesiones.
“Su lema es muy simple y poderoso. Ella cree en crear felicidad, compartir felicidad y celebrar la felicidad”.
A eso, Zafar solo añadiría la fuente de esa felicidad: “es maravilloso compartir mi historia y cómo he salido adelante con El Camino a la Felicidad. Este cambia miles de vidas”.
HECHOS
EL PANORAMA GENERAL
El atractivo universal de El Camino a la Felicidad demostrado en cifras.
21
PRECEPTOS
Inculcando valores morales como “Cuida de ti Mismo” hasta “Sé Digno de Confianza” y “Florece y Prospera”.
115
IDIOMAS
El Camino a la Felicidad tiene el Récord Guinness Mundial como el libro no religioso más traducido.
187
NACIONES
tienen colaboradores y la distribución coordinada de El Camino a la Felicidad.
20 %
DE LOS COLOMBIANOS
ha sido alcanzado por 10 000 oficiales de la Policía Nacional de Colombia distribuyendo el librito.
118
MILLONES DE FOLLETOS
han sido distribuidos mundialmente desde su introducción en 1981, proporcionando una brújula moral para vivir.
HAZ LA DIFERENCIA
La Fundación de El Camino a la Felicidad Internacional trabaja para revertir la decadencia moral de la sociedad restableciendo la confianza y la honestidad, por medio de una amplia distribución de los 21 preceptos. Las donaciones apoyan la producción y distribución del librito de El Camino a la Felicidad y del material del plan de estudios.